Así le dijo una señora a otra en la playa.
La señora 1 estaba sentada en una silla a la orilla del mar, tal vez pensando en los acontecimientos de su vida, mientras observaba las olas del mar moverse con ritmo.
Hizo dos intentos por levantarse, pero debido a las dificultades físicas propias de su edad, no acertaba a tomar impulso suficiente para lograrlo.
Entonces ocurrió algo.
La señora 2 apareció. "Vengo a ayudarte a levantarte. He visto que lo has intentado varias veces y no lo has logrado".
Como por arte de magia, aparecieron enseguida otras dos mujeres. Le dieron la mano a la señora para darle el impulso que aquella necesitaba.
A continuación, sonrisas y un abrazo de agradecimiento.
VENGO A AYUDARTE A LEVANTARTE.
Autora: Patricia Gallardo.
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